Hasta luego, nueva amiga.

Se me hace difícil escribir esta entrada del blog. Hoy es mi última noche en Sevilla, vuelvo a casa después de terminar este curso en la Universidad. Y ¿sabéis qué? lo que estoy experimentando hoy, es una sensación nueva, una sensación que jamás pensé que pudiese tener hace un año, cuando llegué aquí. Así pues, allá vamos.
Me cuesta crear vínculos con las personas, con las cosas, con los lugares...No es lo mismo relacionarse que tener un vínculo con algo o alguien. En ese aspecto, me considero bastante abierto al resto (ahora); pero el concepto de vínculo va más allá. Podríamos decir que una relación está en un plano social y un vínculo en un plano emotivo. Este año, he descubierto que aquí está mi segunda casa, mi segunda casa de verdad. Y se llama Sevilla. ¿Por qué? Por nada y por todo. Sevilla ha supuesto para mi independencia, responsabilidad, aventuras, conocimiento...me ha servido de ventana al mundo, un mundo vivo y lleno de colores. Me ha permitido conocer a grandísimas personas, personas que pasarán temporalmente, y otras muchas que perdurarán por un largo tiempo. Por todo esto, solo tengo palabras de agradecimiento a la vida, por este gran curso que me ha permitido disfrutar. A continuación, me gustaría hacer varias referencias: a mis compañeros de clase decirles que somos una gran generación, y aunque hay personas que caen mejor que otras, siempre mostramos que somos diferentes al resto; en particular, a aquellas personas con las que tengo más relación y las que se han ganado un lugar en mi corazón, lugar que es correspondido con vuestras actitudes hacia mi. Atrás quedarán esas salidas, comidas, parties hard, desayunos eternos, mesitas, previas pre-partido, momentos de nerviosismo antes de los examenes y todos y cada uno de esos momentos que hemos vivido juntos. También se merecen un lugar en esta entrada todos esos compañeros que hacen de mi dia a dia una existencia mucho más placentera a su lado, todos aquellos que hacen de mi y nuestro Colegio Mayor un lugar mejor, aunque siempre hay tiempo de cualquier engaño, véase piscineo, PS3, algun que otro futbolin (vale, en verdad son muchos), esos partidos de fútbol (AUPA ORTOPÉDICA BPIE.) y todos esos actos que hemos disfrutado juntos haciendo de nuestro Colegio un hogar, a vosotros os digo que sois como hermanos, y me ha encantado pasar este curso con vosotros, a ser posible os espero el curso que viene para seguir nuestras vidas paralelamente. Por último, y aunque quede muy cursi, a mi cuarto. Después de dos años, lo abandono, tras pasar muchisimos momentos emotivos en él: realmente es el que me ha visto sufrir y disfrutar, el que sabe todos mis secretos, aquel que me ha visto jodido y sentirme el chico más feliz del mundo, ese cuarto con el que jugaba al Tetris reordenando mil y una veces los muebles fuese el dia y hora (quizá algun problemilla de "reformas" de madrugada) que fuese.
Gracias a Dios, esto no es un adiós, es un hasta luego; en tres meses estamos juntos de nuevo. Pero este año me entristece realmente alejarme de vosotros, porque vosotros os habéis convertido en mi segunda familia, siento que he creado un vínculo con vosotros, y me siento orgulloso de que el destino me haya otorgado tal honor (es una pena que el destino no os prive de lo coñazo que soy por Twitter). Sin embargo, las raíces siempre tiran más que las ramas, y he de reconocer que ardo en ganas de ver a mi familia y amigos de forma continua, de ir a Tarifa a ponerme como un cangrejo, de esas noches en La Terraza (algún día bajaremos a bailar a la pista, aunque solo seamos Pablo y yo), esa barbacoa mítica y esas "quedadas primos". Finalmente, hacer cualquier cosa random, o lo que es lo mismo, dejarse llevar por la esencia de mi ciudad, Algeciras. Al fin y al cabo, esto es solo una prueba más de lo que es la vida: unos días aquí, otros allá, pero siempre tratando de sacarle el néctar al momento.
Hacéis que me sienta orgulloso de la vida que tengo, muchas gracias a todos.
PD: Para que sepáis que es verdad, todo esto queda jurado en nombre de Mohombi jajaja (la primera vez que pongo "jajaja" en una entrada...)
Que paséis un buen verano, nos vemos en unos meses. Y gracias de nuevo.

Lo malo se convierte en bueno/ Cumpleaños

Muy buenas tardes a todos. Por fin es verano ya...¿Cómo? ¿Que aún no lo es? Ah, pensé que después de ver millones de comentarios de la gente sobre sus ganas de la llegada del verano quizá este ya habría llegado. Bueno, no os puedo introducir la entrada de hoy, asi que vamos a dejar que esto fluya como siempre. 

Aunque es difícil, siempre digo eso de que la vida se basa en la alternancia de momentos buenos y momentos malos. A veces es complicado pensar que un momento bueno va a llegar cuando estamos pasando por un momento malo, pero hay que seguir creyendo. La vida me lo ha demostrado una vez más, y no ha precisado de muchos días para enseñármelo. Posiblemente he sufrido uno de los peores inicios de días de cumpleaños que he podido tener en mi vida, tras sufrir una mala noticia, sin embargo, a medida que pasaba el día, mi fe en este pensamiento de alternancia se iba debilitando. A pesar de ello, pronto ocurrió algo que cambió el sentido de mi día. Y me dí cuenta de que aquello en lo que creo es verdad. Unas veces tardarás más en encontrar la respuesta a el por qué de las cosas malas de la vida, pero las buenas llegarán, siempre hay que tenerlo presente. Otra cosa que me agrada y me indica que estoy siguiendo un buen camino en la vida, son las felicitaciones por mi cumpleaños: por primera vez creo que no he recibido ninguna felicitación hipócrita. Siempre está la típica persona que no habla contigo durante el resto del año y con la cual nunca has tenido confianza que el día de tu cumpleaños aprovecha para dejarte un triste comentario de "Felicidades :)" por el simple hecho de guardar las formas. Creo que toda aquella persona que se ha dirigido a mi este año lo ha hecho de corazón, lo cual me incita a seguir usando este filtro social que he ido modificando con el paso del tiempo.

Y por último, uno siempre se pone un poco melancólico cuando pasa un cumpleaños más. Te das cuenta de todos los momentos vividos, y con quienes los has pasado: personas que ya no están, personas que desaparecieron para dejar su lugar a otros, y personas que siempre han estado. Gente que siempre tendrán un lugar en mi corazón, y sé que no hace falta decírselo, porque tanto ellas como yo, lo sabemos. Y con eso, es suficiente. 

La próxima entrada la escribiré el día antes de abandonar Sevilla para volver a mi Algeciras, entrada que utilizaré para hablar de todas estas sensaciones que he vivido durante este magnífico curso 2012/2013. Suerte a todos aquellos que ,al igual que yo, estáis inmersos en exámenes; mucha suerte, y ¡ánimo!

Coherencia

Buenas noches, Hoy hace mucho calor, como siempre últimamente. Después de algunas entradas, llega el momento de desvelar otro de los temas por los que cree este blog. Así pues, hoy voy a hablaros de coherencia.
¿Quien dice si algo está bien o mal? ¿Quien creó la diferencia entre lo correcto y lo incorrecto? Evidentemente, nuestros respectivos padres tienen influencia en esto; ellos son los primeros que tratan de forjarnos una buena educación basado en lo que ambos creen que es lo más idóneo. Otro gran porcentaje sobre esta idea de lo bueno y lo incorrecto, depende de nuestro entorno: familiares, amigos, conocidos...sociedad. Analizamos puntos de vista diferentes y complementamos algunas ideas. Y por último, queda el último "hueco" , el cual rellenamos con nuestros propios conocimientos, los que nosotros consideremos atendiendo a lo vivido, estudiado y experimentado. Cada persona basa su idea de coherencia en algo similar a esto. Hay personas que dan puro significado a la expresión "de tal palo, tal astilla" : mentes vacías que ejercen como clones de las mentes instructoras de sus padres. Un derecho de voz camuflado bajo la manipulación de quien más duele: tus padres. Por otro lado hay personas que se dejan guiar como pez en la corriente, sin atender a valores propios, sino a valores adquiridos y mimetizados, hacer todo lo posible para no desentonar del resto para obtener una buena consideración por parte de todo el mundo. Y por último, los que creen saberlo todo y se toman la vida por su mano, sin atender a lo que otros digan o les aconsejen. Tienen su concepto sobre la vida y no admiten ningún otro, menospreciando cualquier alternativa propuesta por los que no piensen como ellos.
Por supuesto, os he expuesto estos tres casos llevados a sus extremos. La diferencia entre cada persona y el concepto de coherencia radica en el porcentaje que obtengamos en cada uno de los tres campos mencionados, así y solo así conseguiremos formar una personalidad coherente.
Yo me considero una persona coherente. ¿Y qué es la coherencia? Trataré de explicarlo con ejemplos muy simples. Coherencia es no contradecir tus ideas atendiendo al rango que tenga la persona con la que estás hablando. Coherencia es pensar y expresar sabiendo que a no todo el mundo va a gustarle lo que tienes que decir. Coherencia es respeto o fidelidad, no falsedad o conveniencia. Coherencia puede ser algo tan simple como no cambiar tu forma de hablar cuando estás a través de una pantalla de ordenador, o cuando estás con el móvil. Coherencia es reir cuando quieres reir y no hacerlo cuando no quieres. Y decirlo. Eres coherente cuando puedes explicar en todo momento por qué actúas de esa manera...En definitiva, coherencia es  no tener miedo a enseñarte como eres, y a luchar por lo que piensas.
Día tras día, más personas se preocupan más por la competitividad o la conveniencia que por ser seres humanos poseedores de algo más que cualquier cosa material o moda: ellos mismos. Ansían lo que critican bajo una máscara de superficialidad. Y quizá bajo ese disfraz hay ideales mucho peores y fríos que los que tan contianuamente rechazan ante el mundo.
Voy a terminar esta entrada con dos ideas, la primera la he repetido alguna que otra vez, y es que ni Dios (destino, kharma, lo que querais) en su gran magnificencia ha logrado caerle bien a todo el mundo; y la segunda es que sólo si ante las mayores adversidades has seguido siendo tu mismo, podrás decir que has triunfado como ser humano; podrás decir que eres una persona coherente.

Ya llega el verano.

Parecía que no llegaría nunca, pero ya se vislumbra la luz al final del túnel: un nuevo curso que acaba. Buenas a todos otro día más. ¿De qué voy a hablar hoy? Pues no lo sé ni yo.
Hace ya 3 meses que empecé esto, y me siento orgullosos de que en cada entrada he dejado un pedacito de mi; creo que he sabido transmitir mi forma de pensar perfectamente, aunque quizá el exceso de formalismos que he utilizado han ocultado esa alegría y simplicidad que me caracteriza. Por supuesto, muchas gracias a los que os metéis, comentáis, o lo criticáis: sois una recompensa inesperada, me gusta saber vuestra opinión, y me animáis a seguir escribiendo. Bueno, vamos a dejarnos de agradecimientos que una entrada con dos introducciones queda muy extraña...
Pues resulta que el 26 de junio ya tendré oficialmente más de pie y medio en tercero...tercero de Filología Inglesa, quien me lo iba a decir. Junio es un mes bonito donde los haya, y muy intenso, con muchos sentimientos. Además, nací el 21 de este mes, estaba destinado a gustarme Junio. Y es que se me llena el alma hablando de todas estas sensaciones pero cuando me doy la vuelta me veo a mi hace un dos años, terminando el instituto y abriéndose paso a la vida, una vida que me resultaba bastante confusa y grande. Pensaba que me iban a dar mil y un palos en la vida y aqui estoy, han pasado ya dos Junios, y a por el tercero. Que he tenido dificultades es cierto ( ¡culturales maldita, a ver si la apruebo ya! ), pero me ha ido mejor de lo que pensaba. Además todo lo vivido me ha forjado una personalidad de la que me enorgullece ser el propietario, siempre fiel a lo que soy, aunque vaya a contracorriente y sin balsa, mis brazos me ayudan a abrirme paso. Y cuesta. Cuesta, pero como se diría en inglés "in an easier way as I had ever thought" Todas las personas que he conocido y todos los momentos pasados hacen que todo cueste menos.
Así pues, aqui llega otro Junio, otro verano que hay que aprovechar para seguir construyendo esto que tan obsesionado me tiene: vivir.

El equilibrio siempre vuelve.

No me apetece decir buenas tardes hoy. Ni malas tardes, simplemente diré injustas tardes a todos. Ni tampoco voy a escribir una introducción a esta entrada.
Increíble facilidad la que tiene la vida para quitarnos aquello que ansiamos o tenemos. La vida es el pelele de algo más importante. Para mi es Dios: destino, karma...llamadlo como queráis. Un día te da algo en lo que creer, algo que alimentar, y cuando ya lo hemos cebado con esperanza y cariño, nos lo arrebatan. Y duele. Duele hasta el punto de dejarnos vacíos de estima, de ganas, de fuerza...¿Acaso podemos quejarnos? Todos los humanos somos fruto de un proceso similar ¿hemos hecho algo para existir? ¿hemos hecho algo para desaparecer? (bueno...).Cuando la balanza está arriba es fácil dejarse llevar y confiar en que la vida continuará sonriendo, pero cuando baja hasta rozar el suelo, lo normal es permitir que la ira y la depresión se apodere de nuestros pensamientos. Las personas somos culpables del desequilibrio de esta balanza, nuestra actitud avala esta idea. A veces el de ahí arriba tiene que pegarnos un toque, y aunque muchisimas veces lo consideremos cruel o injusto, a veces nos da lo que ni siquiera habíamos pedido ¿Por qué quejarnos si nos quitan algo que en un principio no habíamos querido? Pues yo me quejo, y me quejo porque soy humano. Y como soy humano e imperfecto, voy más allá: me quejo sin razonamiento. Y no tiene nada de malo...ayer lo comprendí. Quejarse es bueno. Llorar es bueno. Estar triste es bueno. Estar enfadado es bueno. Desanimarse es bueno. Pero si me permito el lujo de hacer todo esto, dejadme al menos decir que estoy obligado a luchar, porque luchar no es bueno, luchar es lo que hay que hacer. Luchar es una obligación, y levantarse y pelear también.
Y una vez pasada esta fase, toca volver al principio...ahora solo puedo ser paciente, solo podemos ser pacientes. Todo forma parte del plan de la vida, y quizá ahora no era el momento. Pero cuando llegue, vamos a depositar el doble de nuestras energías, de nuestras ganas, y vamos a volcar toda nuestra felicidad en ello. Porque entonces podremos decir, que el equilibrio volvió. La justicia volvió.