Aunque es difícil, siempre digo eso de que la vida se basa en la alternancia de momentos buenos y momentos malos. A veces es complicado pensar que un momento bueno va a llegar cuando estamos pasando por un momento malo, pero hay que seguir creyendo. La vida me lo ha demostrado una vez más, y no ha precisado de muchos días para enseñármelo. Posiblemente he sufrido uno de los peores inicios de días de cumpleaños que he podido tener en mi vida, tras sufrir una mala noticia, sin embargo, a medida que pasaba el día, mi fe en este pensamiento de alternancia se iba debilitando. A pesar de ello, pronto ocurrió algo que cambió el sentido de mi día. Y me dí cuenta de que aquello en lo que creo es verdad. Unas veces tardarás más en encontrar la respuesta a el por qué de las cosas malas de la vida, pero las buenas llegarán, siempre hay que tenerlo presente. Otra cosa que me agrada y me indica que estoy siguiendo un buen camino en la vida, son las felicitaciones por mi cumpleaños: por primera vez creo que no he recibido ninguna felicitación hipócrita. Siempre está la típica persona que no habla contigo durante el resto del año y con la cual nunca has tenido confianza que el día de tu cumpleaños aprovecha para dejarte un triste comentario de "Felicidades :)" por el simple hecho de guardar las formas. Creo que toda aquella persona que se ha dirigido a mi este año lo ha hecho de corazón, lo cual me incita a seguir usando este filtro social que he ido modificando con el paso del tiempo.
Y por último, uno siempre se pone un poco melancólico cuando pasa un cumpleaños más. Te das cuenta de todos los momentos vividos, y con quienes los has pasado: personas que ya no están, personas que desaparecieron para dejar su lugar a otros, y personas que siempre han estado. Gente que siempre tendrán un lugar en mi corazón, y sé que no hace falta decírselo, porque tanto ellas como yo, lo sabemos. Y con eso, es suficiente.
La próxima entrada la escribiré el día antes de abandonar Sevilla para volver a mi Algeciras, entrada que utilizaré para hablar de todas estas sensaciones que he vivido durante este magnífico curso 2012/2013. Suerte a todos aquellos que ,al igual que yo, estáis inmersos en exámenes; mucha suerte, y ¡ánimo!
